En este momento estás viendo La adicción al azúcar y sus consecuencias

La adicción al azúcar y sus consecuencias

La adicción al azúcar es una de las características más destacadas de la alimentación de las sociedades actuales. Aunque para mucha gente no lo crea, no es exagerado hablar de una adicción al azúcar que es generalizada.

Hay muchas pruebas y síntomas de esta adicción al azúcar. Veamos:

  • Comemos el doble del límite que fija la OMS.
  • La industria alimentaria recurre al azúcar de manera indiscriminada para hacer más sabrosos sus productos, incluidos aquellos que originalmente no contenían nada de azúcar.
  • Cuando una sociedad o un país deja de ser pobre, sus habitantes pasan a consumir muchísimo más azúcar.
  • Los hidratos de carbono, azúcares, son considerados desde hace décadas la base de nuestra alimentación en la pirámide nutricional.
  • Históricamente se ha usado el azúcar para endulzar aquellos alimentos que iban a ser consumidos por niños, haciendo que supieran mejor al gusto de los niños en una edad en la que es mucho más fácil que se acostumbren a grandes cantidades de azúcar en su dieta.

Consumir más de 12 cucharadas al día es nefasto para nuestra salud, agrava enfermedades, infecciones… Pero, ¡un solo refresco contiene más de 12 cucharadas de azúcar!

Tipos de azúcares

Debemos distinguir los azúcares en dos categorías: simples y compuestos. Los simples son los que proliferan en bebidas azúcaradas, bollería y comida basura. Y cada vez es más evidente que su exceso es dañino para la salud.

Aparte de ser altamente adictivo, ya que cuanto más ingerimos, más queremos ingerir.

Pediatras y endocrinos afirman que estos azúcares son un tóxico comparable al alcohol o tabaco, que habría que anunciarlo en los productos, e incluso gravarlo con más impuestos.

Hay otra forma de categorizar los azúcares

Según la velocidad de absorción intestinal, los carbohidratos se clasifican en diferentes tipos:

  • De absorción muy rápida: mono y disacáridos, como zumos de frutas, miel, azúcar, melazas, siropes…
  • De absorción rápida: mono y disacáridos asociados a fibras como las frutas enteras, los polisacáridos refinados como el pan blanco, las harinas blancas.
  • Absorción lenta: cereales integrales, legumbres y hortalizas.

El 25% o incluso más de las calorías ingeridas proviene de los llamados azúcares rápidos, que ingerimos en forma de azúcar directamente o de forma encubierta en refrescos, salsas, pan, tabaco, jamón york, ketchup, tomate frito……

Muchas personas cuando se les pregunta si consumen azúcar a diario te contestan que no. Dicen que ellos no toman azúcar porque no añaden azúcar al café. Pero sí que lo consumen en las galletas, magdalenas, fiambres, chocolate, patatas fritas…

Existen un gran desconocimiento acerca de dónde se oculta el azúcar.

Consecuencias de la adicción al azúcar

Los problemas del azúcar son innumerables. Entre ellos destaca su efecto desmineralizador de los huesos y de los dientes. En los países industrializados, el 97% de niños menores de 10 años sufren caries. Es a consecuencia del robo de minerales que sufre nuestro organismo a consecuencia del abuso de azúcares. También provoca una carencia entre las vitaminas del grupo B que está relacionado con la aparición de trastornos del sistema nervioso, migrañas.

Hoy sabemos que a adicción al azúcar favorece la aparición de muchas enfermedades. Algunas de ellas son la diabetes, la fibromialgia, el cáncer, las infecciones urinarias y la candidiasis y enfermedades cardiovasculares, pues el organismo almacena el exceso de azúcar en forma de grasa.

Para mantener unos buenos niveles de glucosa en sangre y no sufrir dolor de cabeza ni desmayos debemos consumir hidratos de carbono complejos, en forma de cereales integrales, pues el organismo los convierte en esa glucosa tan necesaria sin que se produzca ni el efecto rebote ni el desmineralizador de los huesos.

Efectos de la adicción al azúcar

Qué significa “efecto rebote”

Cuando ingerimos azúcar simple en el desayuno, por ejemplo, podemos sufrir horas después ese llamado efecto rebote.

Nuestro organismo ha tenido una subida rápida de azúcar, los picos se disparan y nuestro páncreas hace salir insulina para controlar ese subidón de azúcar.

Esa misma insulina será la responsable de ese bajón de azúcar que nos provoca mareos, vértigo y descoordinación.

En ese momento la única solución que encontramos es volver a tomar azúcar, hay personas que siempre llevan un caramelo en el bolsillo, creyendo que así solucionan esas bajadas de azúcar que no entienden por qué les pasan.

Pero además nos crea dependencia y si no tomamos azúcar de forma regular nos afecta a muchos niveles, sobre todo mental. Y es que no es nada fácil desengancharse del azúcar.

Lo curioso es que nos provoca en realidad más cansancio, irritabilidad y sensación de resaca.

¿Nos engañan los anuncios sobre lo importante que es el azúcar en la dieta?

Cuando oímos o leemos que ciertos anuncios publicitarios nos hablan de la importancia del azúcar para nuestra salud, nos están confundiendo. No es el azúcar lo que necesitamos para tener energía, es la glucosa que nos aportan los distintos alimentos que ingerimos en la dieta.

Cuando nos despertamos por la mañana nuestro nivel de glucosa es bajo, pues llevamos sin comer unas 8 horas desde la cena. Por eso es tan importante desayunar de forma adecuada, para subir ese nivel de glucosa y que nos aporte energía durante toda la mañana.

¿Qué desayuno te aporta glucosa adecuada?

Carbohidratos completos, proteínas y grasas.

Un bol de cereales integrales sin azúcar + leche vegetal sin azúcar, de almendras ideal + frutos secos.

Tostadas de pan integral sin gluten o de pan de espelta+ atún+ té rojo.

¿Qué desayuno desequilibra la glucosa y causa un aumento desproporcionado de azúcar en sangre provocando el efecto rebote a las pocas horas?

Café con azúcar + galletas o cereales con azúcar + zumo de naranja.

Después de un desayuno como este se disparan los siguientes síntomas:

Temblores, agotamiento, irritabilidad, necesidad de comer algo dulce, tomar un café, fumar.

Los azúcares no solo no nos aportan energía, nos la roban.

Qué notamos cuando ingerimos demasiado azúcar

El azúcar es absorbido muy rápido por el intestino delgado provocando una brusca hiperglucemia, que nos conduce a un estado de excitación física y mental.

Posteriormente tendremos una reacción de hipoglucemia que va acompañada de depresión mental, cansancio físico, desfallecimiento matinal y a mediodía. Esto nos incita a tomar estimulantes que van a causar una nueva hiperglucemia y horas después tendremos una nueva hipoglucemia. El organismo acaba agotado, el sistema nervioso muy alterado y esto conduce a un estado de irritabilidad, cansancio, agresividad y debilitamiento general.

Los más perjudicados son los niños

Tras el consumo de alimentos azucarados, la concentración mental disminuye y con ella el rendimiento escolar.

Estos niños que desayunan zumo, leche, bollería, van de la hiperactividad exagerada a la melancolía y sufren más infecciones.

A la larga una dieta rica en azúcares puede tener consecuencias graves en su vida adulta y su personalidad. Pueden ser el preámbulo de delincuencia, drogas, alcohol y depresiones.

 

Los niños que durante años abusan del azúcar tienen un mayor riesgo de contraer diabetes, cáncer y enfermedades coronarias de adultos.

La industria alimentaria abusa de los azúcares añadidos en sus productos destinados a la infancia. Los niños son incluso más fáciles de «enganchar» al azúcar que los adultos. Además, generar la adicción al azúcar desde edades muy tempranas hace que el sentido del gusto se modifique. Estos niños serán adultos que demandarán productos más azucarados porque si no les sabrán «muy sosos». Quedan tan acostumbrados a la presencia de azúcar en su alimentación que la demandan como buenos adictos.

Cómo sustituir el azúcar y salir de esta adicción

Si eres un gran consumidor de azúcares y dulces, has de saber que al abandonar estos te pueden aparecer durante algunos días síntomas como:

Fatiga, irritabilidad, depresión, dolor de cabeza,  falta de fuerzas, apatía, taquicardia, palpitaciones, insomnio.

Para minimizar estos síntomas puedes consumir pequeñas cantidades de uvas pasas, orejones, frutas maduras y cereales integrales.

La stevia te puede ayudar a endulzar tus infusiones, café y bebidas vegetales.

No te recomiendo sustituir el azúcar por melazas, siropes o miel. Todos ellos tienen una alta concentración de glucosa de absorción rápida que te llevarán a una hiperglucemia seguida de una hipoglucemia. Esto te causará el mismo efecto rebote que el azúcar.

Cuando ya hayas podido estabilizarte y controles mejor la adicción al azúcar, puedes utilizar stevia y, en poca cantidad, azúcar de coco.

Lo más importante para no recaer en estas hipo e hiperglucemias es la cantidad de azúcar de coco que consumas.

Qué es el índice glucémico de los alimentos

Mantener los índices de glucosa en la sangre es primordial para nuestro equilibrio. La concentración normal de glucosa en sangre es de unos 80mg/dl. Por debajo ocurre la hipoglucemia y por encima la hiperglucemia.

 

El índice glucémico indica la rapidez con la que un carbohidrato sube el nivel de glucosa en sangre. Por tanto es un buen dato para evitar caer en la adicción al azúcar.

Tabla de alimentos y su índice glucémico como índice 100

  • Maltosa 138.
  • Glucosa 100.
  • Puré de patatas 90.
  • Miel 90.
  • Palomitas 85.
  • Sacarosa 75.
  • Pan blanco 70.
  • Patatas hervidas 70.
  • Galletas 70.
  • Maíz 70.
  • Arroz blanco 70.
  • Remolacha 65.
  • Plátano 60.
  • Pastas 65.
  • Pan con salvado 50.
  • Arroz integral 50.
  • Copos de avena 40.
  • Alubias rojas 40.
  • Pan integral 35.
  • Lácteos 35.
  • Azúcar de coco 35.
  • Lentejas 30.
  • Garbanzos 30.
  • Pasta integral 30.
  • Fruta fresca 30.
  • Fructosa 20.
  • Soja 15.
  • Verduras 15.

Cuanto más procesado esté un alimento, mayor es el índice glucémico. Cuanto más alto sea el índice glucémico, mayor será la descarga de insulina y más fácil es llegar a una hipoglucemia. Del mismo modo, más se transformará ese carbohidrato en grasa. Por lo tanto, la adicción al azúcar también nos hace ganar peso y tener un cuerpo más graso.

Conclusión

Está claro que la adicción al azúcar nos afecta de muchas maneras perjudiciales. Combatirla y prevenirla es uno de los mejores favores que podemos hacerle a nuestra salud. Como toda adicción, cuanto antes la eliminemos, mejor.

El apego al azúcar es bastante difícil de controlar y de superar. Pero si sufres infecciones de orina repetitiva, dolores articulares y musculares o migrañas, mejor empieza tu desintoxicación lo antes posible. No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy y tu salud te lo agradecerá.

 

Please follow and like us:

Deja una respuesta